Enseñarle a los niños a tener una autoestima saludable, es una lección para el mundo

Algo que todos los padres hemos escuchado hablar, es sobre la importancia de enseñarle a los niños a tener una buena autoestima, cosa que desde luego nos tomamos muy en serio. Sin embargo, pocas veces nos cuenta cómo al ayudar a nuestros hijos comenzamos a mejorar un poco la vida de los demás. Enseñarle a los niños a tener una autoestima saludable es lección para el mundo. 

La labor que nosotros hacemos como padres no solo queda en las enseñanzas que nuestro pequeño le enseñará a sus hijos y luego a sus nietos, es algo que cambiará la vida de otras personas y trazará una parte de la historia. Lo que nosotros hacemos en la vida de nuestros hijos puede cambiar el mundo, por ello tenemos que enseñarle a siempre amarse a pesar de todo. 

Al amarse ellos, mejoran el mundo

¿Alguna vez has escuchado hablar sobre el efecto mariposa? ese que dice que tan solo el pequeño batir de las alas de una delicada mariposa puede crear un huracán del otro lado del mundo. Bueno, algo así funciona la paternidad. Pequeñas acciones que nosotros hacemos pueden tener amplias repercusiones en el mundo, pero de nosotros depende si son buenas o malas. 

Criar bien a un niño puede ser esa acción que salve a una persona en un momento de crisis o quién sabe, puede que también al mundo. La cosa es entender que enseñarles a amarse a ellos mismos no solo tiene efectos en su futuro como adultos, también puede ser clave para la comunidad y sociedad en la que vive. Una persona empatía, solidaria y segura es una persona amada donde sea. 

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Como padres muchas veces nos quedamos preguntándonos, en qué clase de mundo dejaremos a nuestros hijos, sin embargo, no nos damos cuenta que precisamente nuestros hijos puede ser ese alguien que cambie las cosas por medio del amor. Que sean seguros de sí mismos, leales a sus principios, fuertes para poner límites, y más, es lo que le ayudará a sobresalir, no importa lo mal que esté lo demás. 

Autoestima, nada más que eso 

Un niño con buena autoestima es alguien que puede estar en completa oscuridad y aun así ser la luz en la vida de muchas personas, porque solo amarse a sí mismo le da las herramientas para aprender las lecciones necesarias cuando se equivoca y corregir su camino para elegir lo que más le conviene. Enseñarle a amarse es una lección para el mundo, no solo para ellos. 

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Para que esto ocurra permitirle desarrollar sus habilidades, permítele hacer cosas por su cuenta, que aprenda solo y resuelva conflictos por su cuenta, pero tampoco te olvides de alentarlo, aconsejar, decirle cuánto lo quieres y aportar sus debilidades para que pueda convertirlas en fortalezas, como todos los demás. Su salud emocional necesita tener estabilidad.

Jamás nos olvidemos de que los pequeños no solo necesitan comida, disciplina y estudio, también el afecto de sus padres y todas las herramientas posibles para no dudar de sus capacidades. De nosotros depende que ellos sean capaces de amarse a sí mismos por sobre todas las cosas, y con ello, ayudar a que el mundo sea un lugar mejor para todos los demás.